November 26, 2013
La temporada de compras por los días festivos ya ha comenzado, y el día más importante del año para comprar está a la vuelta de la esquina. Este año, muchas tiendas a lo largo de los Estados Unidos y en Florida abrirán la noche del Día de Acción de Gracias (Thanksgiving), comenzando aun más temprano las ventas del Viernes Negro. Estas ventas atraen a miles de compradores, todos ellos esperando aprovechar desde temprano las ofertas de apertura. Debido a tan enormes multitudes, los compradores deben estar conscientes del potencial que hay de accidentes por resbalón, tropezón y caída, que pueden ocurrir cuando existen condiciones riesgosas dentro de las tiendas minoristas.
Muchas lesiones por resbalón, tropezón y caída, ocurren cuando se derrama una sustancia líquida o resbalosa en los pasillos. Una caída por causa de una superficie mojada o resbalosa, podría causar graves lesiones en la cabeza, cuello, espalda o tobillos. Pisos irregulares, alfombras desgarradas o rotas, objetos fuera de lugar, letreros rotos y descolgados, y otras condiciones peligrosas, pueden provocar lesiones por resbalón, tropezón y caída. Aunque los propietarios de las tiendas y sus empleados están sobresaturados de trabajo durante las ventas por los días festivos, aún así tienen el deber de asegurarse de que la tienda se encuentre en condiciones seguras en todo momento, y si existiera una condición peligrosa, deben advertir a los clientes.
Deslindar Culpas en un Caso de Resbalón, Tropezón y Caída
Cuando ocurre un resbalón, tropezón y caída en la propiedad de un minorista, debe demostrarse que una condición peligrosa causó el accidente. Además, debe probarse que el propietario de la tienda sabía del peligro y omitió dar los pasos necesarios para remediar la situación. Esta condición peligrosa o riesgosa debe consistir en algo que conlleve un riesgo irrazonable y algo que una persona no podría haber anticipado. Aun más, las lesiones deben ser el resultado previsible de esa condición peligrosa. Cuando un derrame no es limpiado, y no se proporciona ninguna advertencia a los clientes, es probable que el comprador pudiera resbalar, tropezar o caer. Si el piso está desigual o la alfombra está rota, una vez más, es probable que un cliente pudiera resbalar, tropezar o caer.
Para cobrar una compensación financiera por lesiones por resbalón, tropezón o caída, debe demostrarse que el propietario de la tienda actuó con negligencia al no mantener unas instalaciones seguras. Cuando un accidente pasa por el descuido de un comprador, generalmente la culpa no recae sobre la tienda.
Inmediatamente después de un accidente de resbalón y caída o de tropezón y caída, usted debe buscar atención médica para sus lesiones. Una vez que ha recibido los cuidados médicos, contacte en línea a un Abogado de Resbalón, Tropezón y Caída en Tampa Bay de Whittel & Melton, o bien, comuníquese al 813-221-3200. Podemos proteger sus derechos y ayudarle a recuperar la salud que gozaba antes de que el accidente ocurriera.